Con mi cara encarnada, mi ojo negro y mi vestido verde el campo alegro.
Con mi cara encarnada, mi ojo negro y mi vestido verde el campo alegro.
Es una flor muy hermosa, tiene por nombre un color; nos deleita con su olor y en todo el mundo es famosa.
Por tu aroma y tu color para adornarse te clavan las mujeres en su pelo, los hombres en la solapa.
Es la reina de los mares, su dentadura es muy buena, y por no ir nunca vacía, siempre dicen que va llena.