Trabalenguas

Venancio vendía bonitas boinas, baratas; embalaba baberos, bolillos, botas bellas y boinas buenas. Besaba Venancio a la bebita babosa; baleaba valientes bandidos brabucones y basta verle botar barquitos que bien navegaban para brindar por barloventosa ventura.

Trastabillando tras ella trocar tres trastos trató, tras ella trastabillando trastros tres trastabilló.

Mariana Magaña desenmaraña, mañana la maraña que enmarañará Marina Mañara. ¿Desenmañará mañana Mariana Magaña la enmarañada maraña que enmarañó Marina Mañara?​

Paco Peco, chico rico, le gritaba como loco a su tío Federico. Y éste dijo: Poco a poco, Paco Peco, ¡poco pico!

Recia la rajada rueda, rueda rugiendo rudamente rauda. Rauda rueda rugiendo rudamente la rajada rueda. ¡Rueda rauda, recia rueda, rauda reciamente rueda! ¡Rueda recia, rauda rueda, rugiente rajada rueda!

Pepe peina pocos pelos pero peina peluqueros, peina peine Pirámide pero pocos pelos peina.

Erre con erre, no encuentro; erre con erre, van tres otro animal en mi cuento con erre de rana, de burro y de res.

En un árbol verde, reverde, reverde, todo florecido, resido, resido.

Tres tristes tigres trillan trigo en un trigal, en un trigal trillan trigo tres tristes tigres.

Erase una vieja teca, meca, chiringorda, vieja y sorda. Si la vieja no hubiese sido teca, meca, chiringorda, vieja y sorda, tampoco sus hijos hubieran sido tecos, mecos, chiringordos, viejos y sordos.

Mucha mula cucha, mucha cucha mula, tiene la chamula Chucha. Chucha la chamula tiene mucha mula cucha, mucha cucha mula.

Una vieja bodija pericotija y tarantantija, tenía tres hijas bodijas Perica, Tija y Tarantija.

Fui al perejil y me emperejilé; para desemperejilarme ¿cómo me desemperejilaré?

El que poco coco compre poco coco come, y el que poca capa compre poca capa se pone. Yo poco coco compro, porque poco coco como, si más coco comiera, más coco comprara. Yo poca capa compro, porque poca capa me pongo, poca capa me pongo porque poca capa compro.

Parra tenía una perra. Guerra tenía una parra. La perra de Parra subió a la parra de Guerra. Guerra pegó con la porra a la perra de Parra. Y Parra de dijo a Guerra: -¿Por qué ha pegado Guerra con la porra a la perra de Parra? Y Guerra le contestó: -Si la perra de Parra no hubiera subido a la parra de Guerra, Guerra no hubiese pegado con la porra a la perra de Parra.

Erre con erre, entre brincos; erre con erre, otra vez; vienen los ornitorrincos nadando, corriendo y rodando a la vez.

¡Oro, moro! Agape se paga: ¿Loco o col? Loco como cocol. Oí tapatío. Ana raja la jarana. La nota atonal.

Podador que podas la parra: ¿qué parra podas? ¿podas mi parra o tu parra podas? Ni podo tu parra ni podo mi parra, que podo la parra de mi tío Bartolo.

Poquito a poquito, Copete empaqueta, poquitas copitas, en este paquete.

Doña Díriga, Dáriga, Dóriga, trompa pitáriga tiene unos guantes de pellejo de zírriga, zárriga, zórriga, trompa pitáriga.

La institutriz Miss Tres-tros ha pegado un gran traspiés por subir al treinta y dos en lugar de al treinta y tres.

En el juncal de Junqueira, juncos juntaba Julián. Juntose Juan a juntarlos y juntos juntaron juncos.

Blandos brazos blande Brando, Brando blandos brazos blande, blandos brazos blande Brando.

El perro de San Roque no tiene rabo porque Ramón Ramírez se lo ha robado. Y al perro de Ramón Ramírez ¿quién el rabo le ha robado?

Erre con erre, cigarro; erre con erre, barril; rápido ruedan los carros cargados del ferrocarril.

Cuando cuentes cuentos, cuenta cuántos cuentos cuentas; cuenta cuántos cuentos cuentas, cuando cuentos cuentes

María Chuchena su choza techaba; un techador que por allí pasaba le dijo: – María Chuchena, ¿ techas tu choza o techas la ajena? -No techo mi choza, ni techo la ajena; que techo la choza de María chuchena.

Pepe pecas pica papas con un pico, con un pico pica papas Pepe pecas.

Tres tristes trapecistas con tres trapos troceados hacen trampas truculentas porque suben al trapecio por trapos y no por cuerdas.

Luengas lenguas hacen falta para no trabalenguarse. El que no tenga una luenga lengua bien podrá trabalenguarse.

El cielo está encapotado, ¿quién lo desencapotará? El desencapotador que lo desencapote buen desencapotador será.

Mi mamá me mima y yo mimo a mi mamá.

¿Cómo quieres que te quiera si quién quiero que me quiera no me quiere como quiero que me quiera?

El amor es una locura que solo el cura lo cura, pero el cura que lo cura comete una gran locura.

No me mires que nos miran, nos miran que nos miramos, miremos que no nos miren y cuando no nos miren nos miraremos, porque si nos miramos descubrir pueden que nos amamos.

Parra tenía un perro. Guerra tenía una parra. El perro de Parra subió a la parra de Guerra. Guerra pegó con la porra al perro de Parra. Y Parra le dijo a Guerra: “¿Por qué ha pegado Guerra con la porra al perro de Parra?” Y Guerra le contestó: “Si el perro de Parra no hubiera subido a la parra de Guerra, Guerra no hubiese pegado con la porra al perro de Parra.”

Cuando cuentes cuentos, cuenta cuantos cuentos cuentas, porque si no cuentas cuantos cuentos cuentas nunca sabrás cuantos cuentos cuentas tú

Me han dicho que has dicho un dicho que he dicho yo. El que lo ha dicho, mintió. Y en caso que hubiese dicho ese dicho que tú has dicho que he dicho yo, dicho y redicho quedó. y estaría muy bien dicho, siempre que yo hubiera dicho ese dicho que tú has dicho que he dicho yo.

Pepe Pecas pica papas con un pico, con un pico pica papas Pepe Pecas. Si Pepe Pecas pica papas con un pico, ¿dónde está el pico con que Pepe Pecas pica papas?

El Rey de Constantinopla esta constantinoplizado. Consta que Constanza, no lo pudo desconstantinoplizar El desconstantinoplizador que desconstantinoplizare al Rey de Constantinopla, buen desconstantinoplizador será.

La institutriz Miss Tres-tros ha pegado un gran traspiés por subir al treinta y dos en lugar de al treinta y tres.

Pablito clavó un clavito en la calva de un calvito, en la calva de un calvito Pablito clavó un clavito.

Compró Paco pocas copas y, como pocas copas compró, pocas copas Paco pagó.

Yo no quiero que tú me quieras porque yo te quiero a ti. Queriéndome o sin quererme, yo te quiero porqué sí.

El cielo está enladrillado, ¿quién lo desenladrillará? El desenladrillador que lo desenladrille, buen desenladrillador será.

El hipopótamo Hipo está con hipo. ¿Quién le quita el hipo al hipopótamo Hipo?

¿Cuánta madera roería un roedor si los roedores royeran madera?

Buscaba en el bosque Francisco a un vasco bizco tan brusco, que al verlo le dijo un chusco: – ¡qué vasco bizco tan brusco!

Te quiero porque me quieres, ¿quieres que te quiera más? te quiero más que me quieres, ¿qué más quieres que te quiera?

Si Sansón no sazona su salsa con sal, le sale sosa; le sale sosa su salsa a Sansón si la sazona sin sal.

El amor es una locura que nadie la cura, pero si el cura la cura es una locura del cura.

Ahí donde digo digo, no digo digo, digo Diego. Ahí donde digo Diego, no digo Diego, digo digo

Papá ornitorrinco y sus cinco ornitorrinquitos recorren rincones sequitos.

Si la bruja desbruja al brujo y el brujo a la bruja desbruja, ni el brujo queda desbrujado, ni el brujo desbruja a la bruja.

En un juncal de Junqueira, juncos juntaba Julián. Juntase Juan a juntarlos y juntos juntaron más.

Por los mares de la China, de la China de Pekín, una china chincha mucho con un junco chiquitín. Al que pilla le machaca y le chafa el peluquín y le pincha con chinchetas y le roba su botín, o le plancha los chichones mientras choca so chinchín

Toto toma té, Tita toma mate, y yo me tomo toda mi taza de chocolate.

Compré pocas copas, pocas copas compré, como compré pocas copas, pocas copas pagaré.

A Cuesta le cuesta subir la cuesta, y en medio de la cuesta, ¡¡va y se acuesta!!

Si el caracol tuviera cara como tiene el caracol, fuera cara, fuera col, fuera caracol con cara.